Tensión comercial en La Peatonal expone desafíos de regulación urbana
Un conflicto entre comerciantes informales y la Alcaldía de Panamá en La Peatonal evidencia los complejos desafíos que enfrenta la capital para equilibrar el comercio ambulante con la modernización del espacio público urbano.
Regulación versus supervivencia económica
La disputa surgió cuando funcionarios municipales ordenaron el retiro de toldas utilizadas por buhoneros establecidos, quienes argumentan que estas estructuras son esenciales para proteger su mercancía de las lluvias. Spencer Juárez, subdirector de Microempresarios de la Alcaldía, justificó la medida señalando que las carpas "tapan el libre tránsito y las personas no pueden cruzar de un comercio a otro".
Los comerciantes ambulantes, muchos con más de 20 años de experiencia, expresaron frustración por la falta de comunicación previa sobre las restricciones. La Alcaldía estableció que solo podrán instalar toldas durante precipitaciones, una medida que los buhoneros consideran impráctica dado que atienden solos sus puestos.
Impacto en la economía informal
El conflicto revela tensiones más profundas sobre el manejo de la economía informal en el centro de la capital. Los buhoneros permanentes cuestionaron la distribución de 54 permisos navideños a vendedores temporales, argumentando que esto afecta sus ingresos durante la temporada más importante del año.
Pedro Medina, uno de los comerciantes afectados, manifestó: "A nosotros se nos había dicho que no se iba a otorgar permiso a personas que no son buhoneros permanentes como nosotros, que tenemos más de 20 años".
Antecedentes del desalojo
Este grupo de comerciantes fue desalojado hace un año y trasladado al antiguo edificio Juan Ramón Poll, donde reportaron ventas significativamente menores. Su retorno a La Peatonal refleja la necesidad económica de mantener ubicaciones comercialmente viables.
La situación plantea interrogantes sobre la efectividad de las políticas de reubicación y la necesidad de encontrar soluciones que permitan tanto la modernización urbana como la preservación de fuentes de ingreso para sectores vulnerables de la población.
Desafío de gestión urbana
El incidente subraya los retos que enfrentan las autoridades municipales para implementar políticas de ordenamiento territorial que consideren tanto la fluidez peatonal como las necesidades económicas de los comerciantes informales establecidos.
Pese a las advertencias oficiales, los buhoneros reinstalaron sus carpas, argumentando que no permitirán que las condiciones climáticas dañen sus productos, lo que evidencia la persistencia del conflicto entre regulación municipal y supervivencia económica.