Escalada del conflicto Tailandia-Camboya amenaza estabilidad comercial regional
El cierre total de los pasos fronterizos entre Tailandia y Camboya, anunciado este sábado por el Ministerio del Interior camboyano, representa un golpe significativo para el comercio bilateral y la integración económica del sudeste asiático.
La decisión de Camboya de suspender todos los movimientos de entrada y salida en los cruces fronterizos "hasta nuevo aviso" surge tras el fracaso de las gestiones diplomáticas del presidente estadounidense Donald Trump para mediar en el conflicto.
Impacto económico y desplazamiento masivo
El conflicto ha provocado el desplazamiento de más de medio millón de personas de ambos lados de la frontera, afectando gravemente las actividades comerciales y logísticas en una región clave para el comercio internacional.
Los enfrentamientos, que han dejado 25 muertos esta semana (14 soldados y 7 civiles tailandeses, más 4 civiles camboyanos), tienen su origen en una disputa territorial sobre la demarcación de los 800 kilómetros de frontera establecida durante la época colonial.
Operaciones militares intensifican tensiones
Según el portavoz tailandés Chakkrit Thammavichai, la aviación de su país "destruyó con éxito" dos puentes en territorio camboyano que supuestamente se utilizaban para transportar armamento. Por su parte, el Ministerio de Defensa camboyano denunció que aviones F-16 tailandeses lanzaron siete bombas en su territorio.
El primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, confirmó que su país "seguirá llevando a cabo acciones militares" contra Camboya, contradiciendo los anuncios de Trump sobre un supuesto acuerdo de alto el fuego.
Mediación internacional fracasa
Trump había anunciado el viernes que ambos países habían acordado "cesar todos los disparos" tras conversaciones telefónicas con los primeros ministros. Sin embargo, las hostilidades se reanudaron pocas horas después, evidenciando las limitaciones de la mediación externa.
"Tuve una muy buena conversación esta mañana con el primer ministro de Tailandia y el primer ministro de Camboya sobre el muy desafortunado resurgimiento de su prolongada guerra", declaró Trump en su plataforma Truth Social.
Antecedentes del conflicto
Los combates actuales, que llevan siete días consecutivos, superan en duración el episodio de julio que dejó 43 muertos y obligó a evacuar a 300,000 personas. Estados Unidos, China y Malasia habían mediado entonces por un alto el fuego que Tailandia suspendió en noviembre tras incidentes con minas terrestres.
La crisis actual amenaza no solo la estabilidad regional sino también las rutas comerciales estratégicas que conectan el sudeste asiático, afectando potencialmente los flujos de inversión extranjera y el desarrollo de proyectos de infraestructura transfronteriza en la región.